La expectativa de que unas 750.000 personas acudan a la despedida de la reina, cuyo ataúd permanecerá cinco días en Westminster Hall
La parte inicial del duelo por Isabel II forzó a todas a las instituciones británicas a responder a la necesidad de las circunstancias. La segunda parte de la capilla ardiente, que iniciara este martes en Londres y terminara el próximo lunes con el funeral de Estado, va a ser un reto estratégico de dimensiones monumentales.
Las Autoridades Metropolitanas calculan que pueden ser 750.000 las personas que lleguen a dar el último adiós a Isabel II, el día miércoles, a partir de las cinco de la tarde, se iniciara la capilla ardiente. El ataúd de la reina, que reposara la primera noche de regreso a la capital en el Palacio de Buckingham, estará en el centro del señorial Westminster Hall, el trascendental vestíbulo y sala principal anexo a las Casas del Parlamento, lindando con el Támesis
Se realizara una fila que se desplazara con cierta agilidad y que se dividirá en dos al llegar frente del catafalco donde permanece el féretro. Ningún individuo podrá detener su paso al lado del féretro. Pese a eso, la espera, según ha informado la policía, puede ser de 35 horas.
Difícil, hasta para los más devotos, el Westminster Hall permanecerá apertura do 24 horas del día. Nadie podrá sentarse a descansar, y menos acampar durante la espera. Habrá baños móviles, y 10.000 policías se desplegaran por la Ciudad. Se otorgaran pulseras de identificación a las personas que hagan fila, para permitirles abandonar por momentos sus puestos. La fila se fraccionara en distintos segmentos, para lograr cerrar a intervalos y permitir algo de libertad de movimiento, a modo de descanso, a los asistentes.
No ha aumentado el nivel de alerta terrorista en Londres, pero los controles de acceso a Westminster Hall serán muy parecidos al de los aeropuertos. Círculos de seguridad, detector de metales, y requisa de bolsos y mochilas. Se controlará mucho el tamaño de estos últimos, y se aconseja no acudir allí con bolsas demasiado grandes.
Los hoteles están a plena capacidad, y el Gobierno tiene previsto permitir excepcional mente que los restaurantes, bares y pubs pueden permanecer abiertos las 24 horas del día
Comments